LÁGRIMAS
Los recuerdos se vuelven agua
cuando la memoria se hunde
en el océano del tiempo.
El pasado se filtra
por las grietas del presente,
dejando un rastro salino
de ausencias y deseos.
Cada gota es una historia,
un fragmento de vida
que se disuelve.
Río sin fin,
que fluye sin cesar,
llevando consigo
las huellas de mi existencia
hacia el océano infinito
de lo que ya no es,
de lo que solo vive
en la profunda marea
de mi corazón.
Jorge Alberto Narváez Ceballos
Ufff muy hermoso.
ResponderBorrarFelicitaciones