miércoles, 20 de mayo de 2020
TEXTO
domingo, 19 de abril de 2020
miércoles, 15 de abril de 2020
martes, 14 de abril de 2020
domingo, 12 de abril de 2020
martes, 25 de febrero de 2020
VAMPIROS
lunes, 24 de febrero de 2020
GATO
Pensé que mirar la tarde en la ventana era suficiente. Sentir el aire golpear el vidrio de ese rectángulo abrazando el gato, contemplando el aire mecer el árbol de enfrente, esperándote sin esperar que regreses.
TU RISA
Hoy, temprano en la mañana, recordé el timbre especial de tu risa. Entonces sentí esa sensación de bienestar que da un lunes de vacaciones, después de mirar el despertador y decirle con la mirada que te vas a quedar en la cama hasta que te dé la gana. O esa tranquilidad que encuentras al mirar el puerto después de remar a través de las olas durante mucho tiempo, ese suspirar por saber que lo peor ya pasó. La alegría misma hecha sonido.
viernes, 14 de febrero de 2020
NARIÑO
Esta tierra se sostiene en una nube
Y se pierde como un sueño en medio de la noche
Esta tierra es solo un punto más allá del horizonte
Un aro bordado de sol y de sudores
Esta tierra no es nada más que lo que vos quieras
Una árida estepa empolvada bajo el viento
O una fértil franja de este trópico musicalizado por tu risa
Esta tierra sos vos aunque aún no lo sepas
Es agua y barro
Es árbol frondoso al lado del camino
Es olor a leña que evoca los sabores
En la tulpa sentados al lado de la abuela
Esta tierra es lo que quieras o lo que dejes que otro quiera
Las palomas azuladas a lo largo de los aleros
La canción de cuerdas de guitarra
O solo un montón de trastos viejos arrumados
Esta tierra es y será el resultado
Del amor y el compromiso que vos tengas
No de lo que te digan que ya hicieron
Porque todo está por hacer y por soñarlo de nuevo
martes, 11 de febrero de 2020
AMANECERES
Quiero un beso tuyo, un beso mañanero, un abrazo que me
rompa los huesos con su fuerza y su ternura. Quiero tu voz en mi oído, una
palabra suave que me retumbe en la mente todo el día.
Quiero que me aprietes, como apretabas tus muñecas cuando
eras niña. Dame, en un instante, más que un sueño, una certeza: la certeza de
vivir por un motivo. Porque te pienso en el filo del deseo, en el borde del
abismo.
Quiero encontrar ese punto cardinal en tu piel, como una
rosa de los vientos. El punto desde el que se salta al vacío, una y otra vez.
Quiero recorrer la memoria de tu piel, volver a sentir ese latido que quiere
escapar de tu pecho.
Quiero que me desees con un fervor inatajable, que me hagas
tuyo, que descanse entre tus brazos después de amarnos sin descanso. Y
entonces, oír el latido en tu pecho, después de haber alcanzado juntos el
cielo.
Quiero besarte despacio, poco a poco, resucitar en tu
memoria. Quiero tu lengua, el sabor de tus labios. Y entonces sí, bajar,
recorrer palmo a palmo, explorando tus caminos hasta perderme en tus espasmos.
Quiero que sientas mis manos reencontrando tus sueños. Ver
tus ojos asombrados cuando los míos brillen de deseo. Quiero escuchar ese
suspiro que te deje sin aliento.
Quiero dejarme llevar por las últimas palabras al final del
penúltimo momento, cuando juntos reconozcamos el sendero de tu piel, apretada
entre mis brazos, y morir en tus surcos, para renacer en tus deseos.