Hablar de mi país
es hablar de la historia de la ignominia
no hay lugar donde no quede vestigio
de un recuerdo voraz y espantoso
Hablar de mi país
es hablar del miedo recorriendo el cuerpo
de niños mutilados por las minas
de mujeres corriendo en medio de la noche
Hablar de mi país
es demencial, embriagado, contagioso
correr detrás del carro de la huida
llegar y darse cuenta
que no hay camino
Hablar de mi país
es hablar de las mismas diez familias
multiplicadoras de odio y de saqueos
los mismos que se han eternizado en el poder
con ejércitos privados
y la privación de la alegría
Hablar de mi país
es sin embargo
hablar de la búsqueda incesante
de la paz, de la dicha y de la vida
de hombres y mujeres valientes
de anhelos, de inteligencia,
de osadía
Hablar de mi país
es hablar de días largos caminando
de noches sin dormir
de tardes enteras ideando y construyendo
la forma de reír y de soñar de nuevo
Hablar de mi país
eres tu y tu sonrisa
es el abrazo de mi madre
el respaldo de mi gente en esta lucha
es la mirada altiva aún el miedo
es el grito y la esperanza viva
Hablar de mi país
es encontrarte en la calle y caminarla juntos
es la pinta que le llega a unos cuantos
es esos cuantos que se llevan el mensaje
es multiplicarse
para seguir peleando
Hablar de mi país
es que entendamos
por fin
un día
que la lucha es aquí y ahora
eres tu y yo
unidos y venciendo
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